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La candidiasis es una infección fúngica común en madres lactantes y niños. La violeta de genciana se puede utilizar como tratamiento tópico para los casos de micosis por cándida en el trasero de un bebé. El niño no puede presentar ninguna manifestación si tiene menos de seis semanas. Sin embargo, los síntomas pueden incluir enrojecimiento y dolor en los senos de la madre, pequeñas manchas blancas en la boca y la lengua del bebé y erupciones graves del pañal que parecen quemaduras. La descamación de la piel de los pezones de la madre o del trasero del bebé también son signos de candidiasis.
Paso 1
Antes de aplicar violeta de genciana, frote aceite de oliva en el trasero de su bebé. Esto minimizará la coloración.
Paso 2
Aplique violeta de genciana en las áreas afectadas del culito de su bebé. Utilice un hisopo de algodón para cada aplicación. Si deja secar el área, no manchará la ropa ni las sábanas.
Paso 3
Vuelva a aplicar durante tres días. Aunque los síntomas deben aliviarse unas pocas horas después de la primera aplicación, todos los síntomas deben desaparecer al tercer día. Si los síntomas persisten, es posible que una candidiasis no sea la causa. Continúe aplicando violeta de genciana una vez al día durante una semana si la mejoría es notable.
