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Un caballo tiene un esguince de tobillo cuando los ligamentos que sostienen la articulación del macho se vuelven demasiado largos. Se dice que el caballo es "cojo" y a menudo se sacrifica si el esguince es demasiado grave. Para curar el esguince es necesario ofrecerle fisioterapia y una serie de ejercicios con movimientos mientras recibe otros tratamientos.
Paso 1
Llame al veterinario para que examine al caballo. Cuanto más se examine, antes será posible tratar el dolor y hacer que el caballo se recupere. El veterinario puede diagnosticar al caballo y averiguar si la lesión es solo un esguince de tobillo o si la cojera es el resultado de otra enfermedad, como un absceso.
Paso 2
Aplique hielo al esguince cada 20 minutos durante las primeras 48 horas para reducir la hinchazón y aliviar el dolor. Una alternativa es dejar correr agua fría sobre las patas del caballo o sumergir las patas del caballo en agua fría. El frío minimizará los hematomas y puede controlar los espasmos musculares.
Paso 3
Use bolsas calientes después de que las compresas frías hayan reducido toda la hinchazón. No los aplique hasta que el caballo haya comenzado a sanar. El veterinario puede decirte exactamente cuándo hacerlo, pero probablemente no lo sea hasta dentro de muchos días. El calor húmedo puede ayudar a aliviar el dolor y aumentar el flujo sanguíneo al lugar de la lesión. Aplique las bolsas calientes cada 20 minutos cuando el caballo comience la rehabilitación.
Paso 4
Masajee la lesión suavemente para aumentar la circulación y reducir las cicatrices. Tenga cuidado al masajear la lesión: haga movimientos largos en los tobillos y los pies. El masaje debe combinarse con ejercicios ligeros para que el animal pueda realizar diferentes movimientos antes.
Paso 5
Reemplace los herraduras normales por botas terapéuticas. Estas botas especiales ayudan a absorber el impacto en el suelo mientras el caballo está en proceso de curación.
Paso 6
Dale al caballo suficiente tiempo para descansar y recuperarse. Si intenta trabajar con el animal demasiado pronto, puede volver a lesionar la pata, dificultando la rehabilitación.