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Las estufas eléctricas y de gas funcionan de varias formas, pero ambas tienen quemadores que producen temperaturas similares que varían poco, dependiendo de la temperatura de la habitación, el fabricante y el modelo de la estufa. Elija el ajuste de temperatura correcto que necesita su receta.
Fuego suave
Algunas estufas tienen un ajuste de temperatura muy bajo que derrite el queso, hierve suavemente las salsas y sopas o calienta los alimentos sobrantes lentamente. El fuego suave suele calentar la temperatura de la comida a aproximadamente 60 grados centígrados.
Fuego bajo
El fuego lento es ideal para hervidos rápidos, para cocinar pollos en ollas, cordero, cerdo y otros tipos de carne. Esta temperatura varía, según el tipo de estufa y las condiciones del entorno, pero alcanza unos 90 grados centígrados.
Fuego medio
La temperatura media es ideal para cocinar verduras como cebollas, espárragos y brócoli. Va desde los 100 a los 150 grados centígrados, según el tipo de estufa.
Fuego alto
El fuego alto creará rápidamente una costra de carne o calentará el aceite a temperaturas muy altas, en las que podrá freír patatas, galletas de lluvia y otros tipos de pasta. Va desde 150 a 260 grados centígrados.