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Si su horno se descompone repentinamente o si simplemente no quiere calentar la cocina horneando cosas, convierta su parrilla en un horno. Para hacer esto, solo necesitará algunos ajustes simples en la forma en que lo usa. La barbacoa, ya sea de gas o carbón, produce y hace circular suficiente calor para cocinar completamente una amplia variedad de comidas y refrigerios, incluida la pizza.
Paso 1
Coloca los ladrillos limpios en el fondo de la barbacoa, ya sea de gas o carbón. Algunos ya están hechos de este material, sin necesidad de otros adicionales. Dos o tres ladrillos ordinarios serán suficientes para hacer una cúpula normal. Estos ladrillos ayudarán a retener el calor para mantener las altas temperaturas necesarias en un horno de pizza.
Paso 2
Rodee los ladrillos con carbón, si es una parrilla de carbón. Si el suyo es gas, omita este paso.
Paso 3
Coloque una piedra para pizza en la parrilla antes de encenderla. Se calentará y retendrá el calor rápidamente para hornear la pizza.
Paso 4
Encienda el carbón o encienda el gas de la parrilla. Cúbralo y déjelo ventilar un poco. Deje que se caliente hasta que las brasas estén blancas y brillantes o durante unos 30 minutos.
Paso 5
Coloque una pizza fresca o congelada sobre la piedra. La temperatura dentro de la parrilla debe estar entre 232 y 260 grados Celsius, la temperatura necesaria para hornear una pizza. Tapar la parrilla y dejar hornear la pizza durante 25 minutos. Durante este período, no debe haber llamas. Los restos incandescentes del carbón y los ladrillos calentados emitirán el calor necesario para hornear la pizza. También puede hornear otros alimentos en hasta tres horas con este método.