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La bañera, un lugar para la limpieza y relajación del cuerpo, también es ideal para la formación de óxido. Con el tiempo, el desagüe, los grifos o la porcelana pueden oxidarse. El agua y la humedad, tan frecuentes en los baños, entran en contacto con el metal o la porcelana, formando óxido. La mayoría de los objetos en esta habitación tienen un revestimiento a prueba de óxido, pero eventualmente se desgasta. Afortunadamente, existen algunas formas de eliminar el óxido de las bañeras.
Paso 1
Frote el óxido con una lana de acero y aplíquelo en áreas seleccionadas de la bañera.
Paso 2
Combine 2 partes de sal de mesa y 1 parte de jugo de limón en un tazón pequeño para crear una pasta para quitar óxido.
Paso 3
Usa la esponja para aplicar la pasta sobre el óxido. Dejar actuar dos o tres horas. El ácido del jugo ayudará a eliminar el óxido, mientras que la sal actuará como una sustancia abrasiva.
Paso 4
Humedece la esponja y retira la pasta y el óxido. Abra los grifos de la bañera para enjuagar los restos de los productos.
