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Los tendones son tejidos fibrosos que conectan el músculo al hueso. La tendinitis surge cuando se inflaman, revientan o se irritan. Los síntomas, provocados por un traumatismo o una lesión, pueden incluir rigidez y dolor muscular.
Perros en riesgo
Aunque cualquier perro puede sufrir tendinitis, los más propensos a desarrollar el problema son los perros de carreras, como los galgos, y los que son muy activos físicamente, como los perros de trineo, los perros de caza y de búsqueda y rescate. .
Síntomas
La tendinitis es bastante dolorosa. Cuando un perro desarrolla el problema, comienza a cojear visiblemente y puede llorar de dolor cuando aparece la lesión. El área afectada puede estar limitada al rango de movimiento.
Tratamiento
La aplicación de agua fría o caliente en la zona afectada aliviará al perro. Otros métodos analgésicos pueden incluir reposo, limitación del ejercicio y fármacos antiinflamatorios.
Cuidado veterinario
Si la lesión es crónica o el tendón se ha roto, se requerirá atención veterinaria. Puede haber una acumulación de líquidos que será necesario drenar del área afectada. La cirugía también puede ser necesaria para reparar la lesión debilitante.
Prevención y solución
Evite las actividades repetitivas que puedan implicar mover articulaciones rígidas dolorosas. Se recomiendan períodos de actividad más cortos y frecuentes para perros mayores y de mediana edad en lugar de períodos prolongados, que pueden estirar los tendones del animal.