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La inestabilidad o enfermedad mental es una condición que afecta en gran medida los pensamientos y comportamientos de una persona. Las personas mentalmente inestables a veces experimentan dificultades en las actividades diarias y las demandas y desafíos de la vida. Hay varios signos y síntomas que indican si una persona sufre de inestabilidad mental. Con tratamiento y atención, muchas personas pueden aprender a lidiar con las enfermedades mentales.
Niños
La enfermedad mental se desarrolla durante la vida de una persona, comenzando en la niñez. A veces, tratar las enfermedades mentales a una edad temprana resulta en un futuro más positivo. En los niños pequeños, los signos de inestabilidad mental incluyen: hiperactividad, ansiedad y preocupación excesiva, así como pesadillas recurrentes. En algunos casos, el niño experimentará problemas de comportamiento como agresión, desobediencia y frecuentes ataques de humor. La inestabilidad mental afecta las calificaciones y la socialización del niño en la escuela.
Preadolescentes
En algunos casos, un niño puede comportarse de manera saludable en sus primeros años y luego mostrar signos de desarrollar inestabilidad emocional durante la preadolescencia. Un preadolescente puede volverse retraído, negativo, nervioso, incapaz de hacer frente a las actividades o problemas diarios e incluso mostrar tendencias suicidas. Por lo general, estos cambios emocionales van acompañados de un desafío a la autoridad en forma de vandalismo, robo y merodeo. En algunos casos, el preadolescente puede sufrir problemas físicos, como quejas excesivas de enfermedades y cambios en los hábitos de sueño y alimentación. En otros, puede experimentar abuso de sustancias.
Adultos
La enfermedad mental también se desarrolla en la edad adulta. Un signo temprano de enfermedad mental en adultos es la presencia de depresión extrema y prolongada. Este nivel de depresión implica pensamientos suicidas, incapacidad para lidiar con los problemas diarios, ostracismo social, cambios extremos de humor, hábitos alimenticios y de sueño, ansiedad excesiva y miedo. En algunos casos, el adulto con enfermedad mental puede sufrir alucinaciones y delirios. Otros signos de inestabilidad mental incluyen abuso de sustancias, ira, confusión, negación y múltiples condiciones físicas inexplicables.
Tratamiento
La inestabilidad mental se puede tratar. Generalmente, una persona con una enfermedad mental puede recuperarse completamente con tratamiento. En muchos casos, sin embargo, el tratamiento solo alivia la afección. Para obtener mejores resultados, el tratamiento debe comenzar a la primera señal de síntomas de enfermedad mental. Por lo general, los tratamientos eficaces combinan la atención psicológica y la medicación.