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Hacer jabón de lavar casero es muy fácil y mucho más económico que comprar productos comerciales. El bicarbonato de sodio es un quitamanchas natural, por lo que agregarlo al jabón aumenta su capacidad de limpieza. Use bicarbonato de sodio, jabón en barra, bórax o vinagre y unas gotas de aceite esencial para darle un olor agradable.
Barra de jabón
Para hacer su propio bicarbonato de sodio, también necesitará agua caliente y jabón en barra. Elija un jabón sin perfume o con un aroma suave, especialmente si usa aceite esencial. Raspe el jabón en una sartén y agregue agua para cubrir. Calienta a fuego medio, revolviendo bien hasta que el jabón se derrita. Coloque el jabón derretido en una sartén con agua caliente y agregue el bicarbonato de sodio, revolviendo bien hasta que esté bien mezclado. Coloque el jabón en una botella limpia y usada con tapa. Agite bien antes de usar y agregue 1/2 a 1 taza del producto por cada carga de ropa.
Bórax
Con este método, producirá un detergente en polvo. El bórax es un mineral natural que se utiliza como limpiador y se vende con productos de limpieza. Esta sustancia se puede mezclar con bicarbonato para producir detergente en polvo de la siguiente manera: mezcle bicarbonato, bórax, carbonato de sodio y trozos de jabón en barra rallado. Mezcle bien los ingredientes y guárdelos en un frasco con tapa. Antes de usar, revuelva bien y use 1/8 de taza por cada carga de ropa.
Vinagre
Aunque parece extraño usar vinagre para lavar la ropa, es un gran limpiador. Para hacer un jabón potente, combine vinagre, carbonato de sodio, bicarbonato de sodio y jabón líquido. Ponga el jabón en un bol y mezcle el carbonato y el bicarbonato. Agregue el vinagre gradualmente, mientras revuelve. La mezcla producirá espuma y luego se convertirá en una pasta. Continúe mezclando y disuelva cualquier acumulación que se forme. Use 1/2 taza por cada carga de ropa.
Consejos
Si usa agua de pozo o si el agua de su casa contiene muchos desechos y su ropa se desvanece, ajuste la receta agregando un poco más de jabón o bicarbonato de sodio. Como algunas recetas requieren agua caliente, vea si algún restaurante cerca de su casa tiene contenedores de aceite vacíos. Lávalas y úsalas para guardar tu jabón.