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Al instalar bloques de vidrio, es necesario usar espaciadores para asegurarse de que estén nivelados y espaciados uniformemente, de lo contrario, el proyecto no solo estará mal hecho, sino que tampoco será firme. Sin embargo, el truco para usar espaciadores no es solo presionarlos durante el proceso de instalación, sino también quitarlos en el momento adecuado. Al estar fabricados en plástico duradero, resisten el proceso de instalación aunque sean frágiles y es esta característica la que permite que se retiren al final. Aunque no salgan del todo, la parte visible se despegará.
Paso 1
Cepille los bloques de vidrio y los espacios entre ellos después de que todos estén en su lugar, pero antes de que se seque el mortero. Utilice una esponja o un paño limpio y húmedo para eliminar el exceso de mortero de las juntas y la superficie del vidrio.
Paso 2
Apriete el espaciador de plástico con unos alicates de punta fina y luego gírelo hasta que se afloje. Repita con todos los espaciadores visibles.
Paso 3
Rellene los espacios que dejan los espaciadores con mortero. Extiéndalo con cuidado sobre las juntas y retire el exceso antes de secar. Deseche los espaciadores retirados.
