Contenido
- Los ingredientes (o la falta de ellos) pueden ser engañosos
- Potencial bacteriológico
- Ingesta inadecuada
A los perros les encantan los masticables de cuero crudo. Como un juguete y una golosina empaquetados en un solo producto, son el paraíso para cualquier canino.Sin embargo, se debe tener cierto cuidado mientras el animal disfruta de los palitos masticables bajo el riesgo de que se produzcan lesiones e incluso la muerte por ingestión inadecuada del producto. De hecho, los problemas de seguridad que rodean a los masticables pueden hacer que los dueños de perros se pregunten si el riesgo realmente vale la pena.
Los ingredientes (o la falta de ellos) pueden ser engañosos
Los masticables suelen estar hechos de cuero de vacuno curado, pero también se pueden hacer con orejas de oveja, cerdo o colas de buey. Hay cortes masticables en cortes naturales y los comprimidos en forma de huesos o mondadientes.
Algunos productos no proporcionan la lista de ingredientes o la tabla nutricional y se pueden encontrar químicos como arsénico, cadmio y plomo en el producto. Son elementos peligrosos para el consumo humano y canino.
Potencial bacteriológico
Ha habido informes de productos contaminados con salmonela, que pueden causar infecciones graves en los perros, provocando diarrea, pérdida de apetito, vómitos e incluso la muerte. Además, puede producirse la contaminación del perro a los seres humanos.
Ingesta inadecuada
Si los masticables se comen en trozos de tamaño irregular, puede presentar graves riesgos para los perros, incluida la muerte. Las piezas prensadas pueden expandirse dentro del estómago del animal, al igual que los palillos de dientes pueden pinchar al perro mientras los mastica. Además, las piezas pequeñas pueden rayar el interior al tragarlas y las piezas más grandes pueden provocar asfixia u obstrucción del estómago y los intestinos, lo que a veces requiere cirugía.
Los veterinarios sugieren que las golosinas masticables sean al menos 5 cm más anchas que la boca del perro para que no pueda tragarlas y que los dueños vigilen al animal mientras disfruta de la golosina.