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Si bien las citas en la adolescencia no son exactamente un concepto nuevo, la naturaleza de las citas ha cambiado mucho, desde que el padre insistió en que a las 10 de la noche su hijo estuviera en casa, y las salidas consistieron a lo sumo en una película y un beso. En los tiempos modernos, los padres tienen mayores preocupaciones sobre las citas en esta etapa de la vida, algunos de ellos con una buena razón.
Actividad sexual temprana
Debido a la presión de los amigos y los medios de comunicación, muchos adolescentes inician la actividad sexual antes de la maduración emocional. Esto puede llevar a relaciones que las personas más maduras evitarían, implicando abuso físico o verbal, o incluso violación. Estas relaciones pueden tener impactos negativos a largo plazo, haciendo que traten sus relaciones futuras con descrédito o desconfianza. Además, dado que los jóvenes a menudo ignoran los consejos sobre las relaciones sexuales sin protección, a los padres les preocupa que las citas puedan provocar problemas de salud graves para sus hijos.
Embarazo en la adolescencia
Otra preocupación de los padres en relación al noviazgo es la posibilidad de un embarazo adolescente, con todo el impacto que puede tener en las adolescentes, en términos de salud y planes de futuro. Por ejemplo, una madre adolescente tiene muchas más probabilidades de abandonar la escuela, tener más dificultades para conseguir un trabajo o terminar viviendo de la asistencia pública. Aunque estos problemas no son insuperables, dificultan la transición a la edad adulta.
Drogas
El consumo de drogas entre los adolescentes es una gran preocupación para los padres. Mientras esté bajo tu techo, puedes vigilarlo, minimizando las posibilidades de que tome alguna droga. Sin embargo, cuando sale con alguien, no hay control directo sobre lo que hace en una cita, en compañía de otros.
Comunidades desconectadas
Una de las preocupaciones sobre las citas con adolescentes es que los padres a menudo no tienen idea de la persona con la que su hijo está saliendo, aparte de una breve introducción. Y si los niños deciden encontrarse con la persona en otro lugar, en lugar de en casa, existe la posibilidad de que los padres no lo conozcan en absoluto. En las últimas décadas, la mayoría de las personas vivían en comunidades donde conocían a sus vecinos y a sus hijos, lo que ya no es el caso en la actualidad.