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Las pociones mágicas son una gran manera de que los niños exploren cómo diferentes ingredientes interactúan entre sí. Si estás haciendo una fiesta temática, tratando de un nuevo juego para Halloween o estás buscando una nueva diversión antes de dormir, una poción mágica puede ser ideal. Afortunadamente, los ingredientes para crearla se pueden encontrar en un supermercado o tiendas comunes.
Crea tu propia poción mágica con algunos utensilios domésticos (Jeanne Studio / Demand Media)
comestible
Una poción mágica comestible es una opción óptima y eficaz para involucrar a los niños con la cocina. Pueden crear un nombre para la poción y ayudar a elegir cada uno de los ingredientes. Por ejemplo, una poción mágica de crecimiento puede requerir varios vegetales verdes en su mezcla, incluyendo guisantes, espinacas y brócoli. Al hacer la poción, un adulto debe ayudar durante la confección de ella, ya que será necesario el uso de una olla grande o caldera en la estufa. Otros suministros para esta poción mágica incluyen las especias y una varita mágica que se puede utilizar para mover la caldera mientras que la poción está cocinando.
Una poción mágica de crecimiento puede requerir varios vegetales verdes en su mezcla, incluyendo los guisantes, espinaca y brócoli (Jeanne Studio / Demand Media)
bebida
Con los ingredientes adecuados, casi toda la bebida puede ser transformada en una poción mágica para los niños. Algunos artículos incluyen malvaviscos y chocolate para bebidas calientes, y cubos de hielo de colores o hielo seco para bebidas frías. Los palos de canela se pueden utilizar como miniveles para agitar las bebidas antes de beber. Servir las bebidas en vasos o tazas opacas ayuda a mantener la poción misteriosa, lo que contribuye a la diversión.
Con los ingredientes adecuados, casi toda la bebida se puede convertir en una poción mágica para los niños (Jeanne Studio / Demand Media)No comestibles
Una mezcla de agua, bicarbonato de sodio y vinagre crea una poción mágica burbujeante y espumoso que puede sorprender a los niños. Las burbujas ocurren como resultado de la combinación de vinagre y la reacción con el bicarbonato de sodio. Estas tres fuentes no sólo son fáciles de encontrar, sino que también tienen varios otros usos domésticos, lo que las hace muy útiles. Añada algunas gotas de colorante alimente a la mezcla para crear una poción personalizada.
Una mezcla de agua, bicarbonato de sodio y vinagre crea una poción mágica burbujeante y espumoso que puede sorprender a los niños (Jeanne Studio / Demand Media)
accesorios
Además de un gran caldero negro, hay algunos otros materiales que pueden hacer una poción mágica casera más convincente. Los frascos reciclados y pequeños frascos de vidrio se pueden utilizar para el almacenamiento. Una bandeja de cubitos de hielo puede ser usada para congelar las pociones bebibles, de forma que puedan ser rehechas en una fecha posterior.
Frascos reciclados y pequeños frascos de vidrio se pueden utilizar para el almacenamiento (Jeanne Studio / Demand Media)