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Perder una uña del pie puede ser bastante doloroso, incluso si se considera solo una lesión menor. Mantener el dedo lesionado limpio y protegido puede prevenir infecciones y estimular el crecimiento de una nueva uña. Si sospecha que hay una infección o un problema con el proceso de curación, consulte a un médico para obtener más instrucciones.
La limpieza es la clave
Aunque el hematoma puede ser bastante feo, limpie el área todos los días con agua y jabón bactericida. Aplique una pomada como "Neosporin" en el área seca después de limpiar. "Neosporin" es el nombre de un antibiótico que se debe aplicar en el lugar para acelerar el proceso de curación y prevenir infecciones.
Cubre el área
Después de limpiar la herida y aplicar la pomada bactericida, cubra el área con una venda adhesiva. Asegúrate de que el adhesivo no toque la herida, ya que puede irritar la zona al tirar. Si la piel donde estaba la uña es muy frágil, corte un poco de gasa y envuelva el área. Esto proporcionará un poco más de apoyo. Use calcetines y zapatos cómodos durante el proceso de curación para evitar molestias.
Supervisar la curación
Aunque debería crecer una uña nueva en su lugar, puede llevar algunas semanas. Como el proceso es lento, es fundamental vigilar su curación. Si el dolor aumenta o cree que la herida no se está curando correctamente, consulte a un médico.