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Los limones son caros durante la temporada baja, pero cuando la vida te da limones a buen precio, no hagas una limonada, haz un jugo concentrado de limón fresco para que lo uses durante el resto del año. El concentrado casero te salvará del jugo concentrado con gran cantidad de azúcar y aditivos químicos disponibles en el mercado, y asegurará que, no importa la temporada, un vaso de limonada estará disponible en unos minutos.
Paso 1
Exprime unos 15 limones frescos para hacer 3 tazas de jugo. Colar el jugo a través de un colador o filtro para eliminar todas las semillas o fibras de la pulpa. Reserva.
Paso 2
Hierva las 3 tazas de azúcar con 2 tazas de agua en una cacerola grande. Asegúrese de que todo el azúcar se disuelva (como al hacer mermelada o gelatina). Cuando hierva la mezcla de agua y azúcar, retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
Paso 3
Mezclar las 3 tazas de jugo de limón con el almíbar de azúcar y mezclar bien. Cuando la mezcla esté a temperatura ambiente, divídala en dos o tres recipientes de plástico y congele. Puede almacenar el concentrado en el congelador hasta por seis meses.
Paso 4
Cuando desee hacer limonada, descongele el concentrado de limón en el refrigerador, en la encimera o en un baño de agua. Mezcle un recipiente (si está dividido en dos) con 3 tazas de agua. Si se divide en tres recipientes, mezcle un recipiente con 2 tazas de agua. Revuelva, agregue hielo y beba.
