Contenido
El jengibre en polvo y el fresco se usan de manera muy diferente en la cocina. La primera versión de esta especia picante se usa generalmente para condimentar galletas, panes y pasteles. Ocasionalmente se usa como una sabrosa adición a carnes, como pollo o jamón, y puede ser un ingrediente en bebidas condimentadas, como vino caliente y sidra. El jengibre fresco se suele saltear en platos de temática asiática o se mezcla en una licuadora para darle un toque especial a las vitaminas. En ocasiones, el reemplazo funcionará, pero las dos formas no deben considerarse completamente intercambiables.
Paso 1
Mide 1/8 de cucharadita de jengibre en polvo por una cucharada de jengibre fresco. Esto puede parecer una gran diferencia, ya que 1/8 de cucharadita son solo unas pizcas, pero el jengibre en polvo es muy potente y solo un poco tiene grandes efectos.
Paso 2
Cocine con jengibre en polvo con más cuidado que fresco. Agréguelo a las primeras etapas de un guiso o una salsa de curry para permitir que los sabores suaves impregnen el plato. Debido al hecho de que el jengibre en polvo no tiene el atractivo picante y animado del fresco, es mejor no espolvorearlo en los platos antes de servir.
Paso 3
No sustituya ciertos platos con jengibre fresco en polvo. Si está preparando una receta de sushi japonés que requiere jengibre fresco, el reemplazo no funcionará debido a la diferencia de sabor y textura. Es mejor dejarlo fuera de la receta que llamar la atención sobre su ausencia. El jengibre en polvo se sirve mejor con platos calientes y salados, mientras que el fresco es un excelente alimento refrescante y crudo. Esta distinción debería ayudarlo a decidir cuándo es apropiado el reemplazo.