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Los síntomas del embarazo que pueden ocurrir después de la fertilización in vitro (FIV) no son diferentes de los síntomas comunes del embarazo temprano. Una vez que los embriones se transfieren de nuevo al útero, si se produce el embarazo, procederá como cualquier otro. Sin embargo, una mujer que se ha sometido a una FIV debe interpretar con precaución cualquier síntoma que experimente. El procedimiento de FIV generalmente requiere que la mujer tome ciertas hormonas que pueden causar síntomas similares a los del embarazo incluso en mujeres en las que no se ha establecido el embarazo.
Fatiga
Es común que las mujeres comiencen a sentir fatiga días después de la concepción (o en el caso de pacientes de FIV, transferencia). Este síntoma es causado por un pico en la hormona progesterona. En los embarazos naturales, el cuerpo libera progesterona en grandes cantidades, ya que es necesaria para mantener el revestimiento del útero en el que se implanta un óvulo fertilizado. Después de la transferencia, los pacientes de FIV deben tomar suplementos o inyecciones de progesterona para mantener este revestimiento. La fatiga que siente una paciente de FIV después de la transferencia puede deberse a los suplementos de progesterona o debido a la progesterona que libera el cuerpo debido al embarazo.
Cambios en los senos
Dentro de una o dos semanas después de la transferencia de un embrión, una mujer puede notar que sus senos están hinchados o muy sensibles. También puede sentir un hormigueo en los pezones y notar que sus areolas se han oscurecido. Al principio del embarazo, la mayoría o todos los cambios en los senos pueden ocurrir debido a los altos niveles de las hormonas estrógeno y progesterona. Sin embargo, la paciente de FIV debe interpretar estos síntomas con un poco de sospecha, ya que es casi seguro que esté tomando suplementos de progesterona que también pueden causar tales síntomas.
Náusea
Las náuseas son probablemente el signo más conocido de embarazo. Es causada por una mayor cantidad de hormonas en el cuerpo de la mujer. A veces, las náuseas comienzan temprano, una semana después de la concepción. Para el paciente de FIV, puede ocurrir pocos días después de que los embriones se transfieran de nuevo al útero. Aunque las náuseas son el síntoma clásico del embarazo, no todas las mujeres las experimentan. Algunas mujeres embarazadas se sienten perfectamente sanas mientras que otras se sienten enfermas todo el día.
Micción frecuente
Un signo clásico del embarazo temprano es la necesidad de orinar con frecuencia. Según la institución March of Dimes, este síntoma es causado, en parte, por la producción de la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG). La HCG es producida por las células que forman la placenta y, en circunstancias normales, su presencia en el organismo es el signo definitivo del embarazo. Sin embargo, muchos protocolos de FIV requieren que las pacientes tomen inyecciones de hCG después de la transferencia para ayudar a mantener el embarazo, si ocurre. Por lo tanto, si una mujer ha recibido una inyección de hCG, la micción frecuente puede ser causada por la inyección, no por el embarazo.
Ausencia de menstruación
Una paciente de FIV debe esperar que su período llegue aproximadamente 14 días después de la transferencia. Si pasan más de 14 días sin menstruación, la paciente puede estar embarazada. A veces, una mujer puede tener un período menstrual considerablemente menos intenso y más corto de lo habitual; esto también puede ser un signo temprano de embarazo.
