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Si cría pollos, limpiarlos antes de cocinarlos es un paso necesario y confuso. Para ello, es necesario cortarlos y quitarles las vísceras. Antes de eso, se debe quitar la cabeza y las patas del pollo muerto, además de quitarle las plumas. Después de este paso, se pueden extraer las vísceras.
Paso 1
Use el cuchillo para cortar una pequeña abertura en la parte posterior del pollo. Con el pájaro posicionado con la espalda hacia abajo, presione la piel justo encima de la cloaca con una mano y sostenga el cuchillo en un ángulo agudo con la otra.
Paso 2
Haz un pequeño corte a través de la piel con el cuchillo. No corte profundamente, ya que puede perforar el intestino. Corte la piel y la grasa con cuidado; si sale algún líquido en ese momento, deseche el ave.
Paso 3
Use sus dedos para hacer una gran abertura, rasgando la piel. Tenga cuidado de no perforar ninguno de los órganos.
Paso 4
Deje de ensanchar la abertura cuando sea lo suficientemente grande como para que entre la mano. En esta etapa, las heces pueden salir del ave. Esto es normal, pero no siempre sucede. Si ocurre, lávelos con agua, asegurándose de que no queden restos en la cavidad interna de la gallina. Además, lave cualquier superficie contaminada con heces usando una mezcla de agua y lejía.
Paso 5
Coloca tu mano dentro del pollo y suelta todas las entrañas, de ambos lados y arriba. Además, raspe los pulmones, ya que quedará la caja torácica. Luego, saca las tripas.
Paso 6
Tenga cuidado de no apretar ninguna de las tripas lo suficientemente fuerte como para romperlas. Si la vesícula biliar se rompe, por ejemplo, el contenido contaminará todo el pollo. El trabajo finaliza cuando la cavidad está vacía. Lave el pollo cuando termine y deseche todos los órganos.
