Contenido
- Mecanismos rápidos
- Reflejo barorreceptor
- Sistema nervioso simpático
- Sistema nervioso parasimpático
- Secreciones de la glándula suprarrenal
- Mecanismos lentos
La homeostasis es la capacidad del cuerpo para mantener un entorno interno constante, independientemente de las influencias externas. El cuerpo controla la presión arterial, la temperatura, la respiración e incluso los niveles de glucosa en sangre a través de varios mecanismos internos para mantener todo constante. La presión arterial se mantiene dentro de los límites normales, utilizando mecanismos rápidos y lentos. Trabajando juntos, los mecanismos se esfuerzan por mantener una presión de aproximadamente 120/80 mm Hg.
Mecanismos rápidos
El reflejo barorreceptor es uno de los mecanismos más importantes de la homeostasis de acción rápida implicados en la regulación de la presión arterial. Consiste en receptores, nervios sensoriales, bulbo y nervios motores, todos trabajando juntos. Otro mecanismo de acción rápida en la regulación de la presión arterial es la secreción de epinefrina y norepinefrina por la glándula suprarrenal.
Reflejo barorreceptor
Los receptores, llamados barorreceptores, se encuentran en ciertos lugares de las paredes del corazón, donde pueden detectar cualquier cambio en la presión arterial. Los nervios sensoriales se activan después de que los barorreceptores notan un cambio. Envían información al bulbo del cerebro, donde se interpreta. Luego, la médula espinal decide si aumenta o disminuye la presión arterial, que depende de las señales que ha recibido. Los nervios motores de las divisiones simpática y parasimpática del sistema nervioso autónomo se activan para realizar los ajustes necesarios para mantener la presión arterial.
Sistema nervioso simpático
Si es necesario un aumento de la presión arterial, el sistema nervioso simpático funcionará. Este sistema alimenta el sistema eléctrico del corazón y aumentará la frecuencia cardíaca y provocará una contracción más vigorosa en el corazón. El sistema nervioso simpático también provoca la contracción de algunos vasos sanguíneos, lo que aumenta la resistencia de los vasos.Juntas, estas respuestas aumentan la cantidad de sangre bombeada por el corazón cada minuto, lo que aumenta la presión arterial.
Sistema nervioso parasimpático
Cuando se necesita una disminución de la presión arterial, el bulbo le indica al sistema nervioso parasimpático que provoque una disminución en la frecuencia cardíaca, lo que reducirá la presión arterial. Los nervios parasimpáticos también hacen que los vasos sanguíneos se dilaten o desbloqueen, lo que disminuye la resistencia, lo que nuevamente conduce a una presión arterial más baja.
Secreciones de la glándula suprarrenal
La glándula suprarrenal secreta hormonas como epinefrina y norepinefrina. Ambas hormonas actúan para aumentar la cantidad de sangre bombeada por el corazón cada minuto. También hacen que los vasos sanguíneos se contraigan. Estas acciones ayudarán a aumentar la presión arterial.
Mecanismos lentos
Existen varios mecanismos que se ocupan del control a largo plazo de la presión arterial. El mecanismo de renina-angiotensina-aldosterona es el más importante. Los riñones secretan renina al torrente sanguíneo, donde interactúan con la angiotensina. La angiotensina contrae los vasos sanguíneos y también causa secreción de aldosterona. La aldosterona aumenta la cantidad de agua y sodio absorbidos por los riñones, lo que conduce a un aumento en la cantidad de sal y agua en el torrente sanguíneo. Esta combinación de actividades provoca un aumento de la presión arterial.
