Contenido
- ¿Qué hace el carbón activado?
- ¿Por qué alguien le daría carbón activado a un perro?
- ¿Cuáles son los riesgos de administrar carbón activado a un perro?
No le dé carbón activado a su cachorro a menos que esté bajo la supervisión de un veterinario. El carbón activado se usa para tratar los gases y el mal aliento en los perros, pero también para las intoxicaciones. Aunque generalmente es seguro cuando lo usa un veterinario y se vende en varias tiendas de mascotas, no trate a su perro sin consultar a un veterinario, ya que esta sustancia puede causar varios efectos secundarios (incluidas paradas respiratorias fatales).
¿Qué hace el carbón activado?
El carbón activado (vendido en polvo, granos y formas líquidas) se usa en humanos y animales para tratar intoxicaciones y sobredosis, ya que se une al veneno e impide su absorción por el cuerpo. Se ha convertido en el principal tratamiento para las intoxicaciones, porque es muy eficaz. Sin embargo, como es una sustancia muy fuerte, debe administrarse de manera responsable. Si se administra incorrectamente, puede provocar una aspiración pulmonar (que puede ser fatal). Además, para algunas intoxicaciones (ácidos, álcalis, aceite y otras), puede empeorar la situación.
¿Por qué alguien le daría carbón activado a un perro?
El uso más común del carbón activado en el hogar es para curar los gases y el mal aliento en los perros. Dado que estas no son afecciones potencialmente mortales, posponga el tratamiento de su mascota hasta que pueda ver a un veterinario. El carbón activado también puede eliminar toxinas en caso de intoxicación. Muchos libros y sitios web recomendarán carbón activado como primeros auxilios en caso de intoxicación, pero este método de desintoxicación funciona mejor cuando lo administra un profesional experimentado. Hay pasos importantes que debe seguir un profesional inmediatamente después de la administración, que pueden incluir un catéter intravenoso y / o urinario. Si sospecha que su perro ha sido envenenado, busque atención veterinaria de emergencia de inmediato.
¿Cuáles son los riesgos de administrar carbón activado a un perro?
Si el perro es muy sensible o alérgico al carbón activado, la ingestión puede ser fatal. La aspiración de carbón activado puede provocar un paro respiratorio y posiblemente una bronquitis mortal (inflamación de las vías respiratorias más pequeñas de los pulmones, que puede provocar asma); por ello, nunca se utilizará en situaciones en las que el animal no pueda taparse la nariz o la boca (si ha perdido el conocimiento, por ejemplo). Otros riesgos pueden ser: vómitos, estreñimiento o diarrea, baja absorción de nutrientes y deshidratación.