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El desbridamiento es la extracción de tejido sano de una herida para promover la cicatrización. Es necesario para la correcta valoración y tratamiento de todas las lesiones graves, ya sean causadas por lesiones, infecciones mal controladas o quemaduras. Los tipos de desbridamiento varían, el médico decide cuál usar. Sin desbridamiento, la infección puede invadir el torrente sanguíneo y provocar una amputación o incluso la muerte.
mecánico
El método mecánico es uno de los más antiguos. En este procedimiento, se deja secar un apósito de solución salina durante la noche y se adhiere al tejido necrótico (muerto) de la herida. Cuando se retira el apósito al día siguiente, el tejido necrótico sale con él. Este proceso puede ser muy doloroso, porque el apósito se adhiere tanto al tejido vivo como al necrótico. Las heridas que han comenzado a sanar y a producir tejido nuevo no deben pasar por el proceso de desbridamiento con este método, ya que no es selectivo y puede eliminar tejido bueno junto con el tejido comprometido y obstaculizar el proceso de curación.
Autolítico
La autólisis se aprovecha de la capacidad del cuerpo para disolver el tejido muerto utilizando su propia humedad y enzimas. Apósitos húmedos especiales mantienen los fluidos de la herida en contacto con el tejido necrótico, hasta que se licua, luego el tejido necrótico se retira con el apósito. La ventaja obvia del desbridamiento autolítico es que utiliza los propios sistemas del cuerpo para limpiar la herida. El desbridamiento autolítico es el tipo de desbridamiento más selectivo. Elimina solo el tejido necrótico y no daña el tejido sano circundante. El proceso implica poca o ninguna molestia para el paciente.
Quirúrgico
El desbridamiento quirúrgico, con un bisturí o láser, es el método más rápido, pero requiere anestesia y un cirujano. Las ventajas del desbridamiento quirúrgico sobre otros métodos son su rapidez y el grado de precisión con que se puede extraer el tejido necrótico. El cirujano decide exactamente qué se debe extraer para evitar que la infección se propague y preservar el tejido sano tanto como sea posible. El desbridamiento quirúrgico es extremadamente eficaz para eliminar grandes cantidades de tejido necrótico, especialmente si hay una infección.
Químico
El desbridamiento químico se basa en aplicaciones tópicas de soluciones enzimáticas y soluciones que disuelven el tejido necrótico. Debido a que las enzimas no distinguen entre tejido vivo y muerto, el médico o la enfermera (que está familiarizado con las enzimas y cómo funcionan) debe usarlas con precaución. El desbridamiento químico es útil para pacientes que no están lo suficientemente sanos para someterse a una cirugía o que se encuentran en lugares donde la cirugía no es una opción. El desbridamiento químico no sustituye al mecánico o quirúrgico cuando esté indicado.