Contenido
Cuando los árboles están traumatizados, puede ser difícil recuperar su salud. Las tormentas de hielo pueden dañar sus ramas, los rayos pueden romperlas por la mitad, un impacto accidental con un automóvil o equipo de jardinería puede dañar su corteza. Aunque pueda parecer un desafío monumental, algunos árboles pueden recuperar su antigua gloria después de un evento traumático, incluso cuando el daño parece irreversible.
Paso 1
Use un cuchillo afilado para hacer cortes superficiales en el tronco o las ramas y retire cualquier corteza dañada o herida. Esta eliminación asegurará que los nutrientes fluyan de regreso a través de las áreas dañadas.
Paso 2
Puede cualquier rama que se balancee. Disminuir el número de ramas de un árbol reducirá la cantidad de agua necesaria en su interior, lo que reducirá las demandas de sus mecanismos de reparación.
Paso 3
Distribuya una pequeña cantidad de fertilizante alrededor del árbol, comenzando desde un metro de distancia del tronco hasta una medida radial varios metros por delante de donde están las ramas sobre su cabeza. Tenga cuidado de no exagerar con el fertilizante, ya que esto puede crear más estrés en un árbol. Una buena regla general es utilizar 450 g de fertilizante 5-10-5 por cada 2,5 cm de diámetro del tronco, medidos a 30 cm del suelo.
Paso 4
Vuelva a plantar y cubra las raíces que estén expuestas, apoyando el árbol, si es necesario, para que se estabilice.