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Los sistemas de riego están diseñados para transportar agua a través de varias partes de su césped, de modo que pueda suministrar agua sin arrastrar mangueras y aspersores a su alrededor. El agua del sistema debe eliminarse en invierno para evitar la formación de hielo que podría romper los tubos. Cuando el sistema se vuelve a encender después de un receso de invierno, o después de su primera instalación, a veces queda aire atrapado en los tubos. Esto crea un ruido terrible y es mejor eliminarlo para evitar posibles daños.
Paso 1
Retire los cabezales rociadores de las líneas de riego de agua que atraviesan el patio para acelerar la velocidad del agua que corre por las líneas del circuito. Busque los tornillos que los mantienen en su lugar y aflójelos con un destornillador. El aire debe ser expulsado del sistema en unos minutos.
Paso 2
Encienda el sistema de riego en el panel de control.
Paso 3
Vaya a las válvulas principales, donde el sistema de riego está conectado a la línea de agua de la casa. Debería ver varias válvulas que funcionan para los diferentes circuitos de su sistema de riego. Estos están automatizados para que el sistema riegue varias secciones del césped, a veces separadas. Esto es necesario para que salga suficiente presión de agua de los rociadores.
Paso 4
Desconecte manualmente al menos dos de las válvulas del circuito conectadas. Esto libera el tubo principal más rápidamente, abriendo los tubos delante de él, lo que a su vez expulsa el aire.
Paso 5
Apague el sistema de riego después de cinco minutos de descarga y luego restaure las válvulas del circuito a su posición original.
Paso 6
Vuelva a colocar los rociadores en la línea de riego.
