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El carbón activado se usa comúnmente para filtrar las impurezas del agua destinada al consumo humano y los acuarios de peces. El cloro, los pesticidas y los solventes industriales se encuentran entre los contaminantes que el carbón activado puede eliminar del agua. Además, este material puede usarse para depurar aire y otros gases, además de la destilación de bebidas alcohólicas y, en medicina, para tratar intoxicaciones. Es posible reciclar el carbón activado mediante un tratamiento térmico realizado en casa utilizando solo unos pocos instrumentos.
Paso 1
Coloque el carbón activado en un colador de malla fina y enjuáguelo con agua caliente.
Paso 2
Deje el carbón en una olla con agua hirviendo durante unos 15 minutos. A medida que las impurezas abandonen el carbón, se liberará un mal olor. Hervir hasta que se disipen todos los olores. Puede ser necesario enjuagar y hervir el carbón varias veces hasta que el olor desaparezca por completo.
Paso 3
Coloque el carbón en una bandeja para hornear y déjelo secar durante varias horas. Su vapor es inflamable, así que mantenga el área bien ventilada.
Paso 4
Hornee el carbón a 150 ° C durante unas tres horas. Como su vapor es inflamable, use un horno eléctrico.
Paso 5
Deje enfriar el carbón y reutilícelo.
