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El linfoma es una de las formas más comunes de cáncer que puede ocurrir en un perro. Esta forma de cáncer, también conocida como linfosarcoma o linfoma no Hodgkin, es un cáncer maligno que afecta los ganglios linfáticos y el sistema linfoide. La etapa final del linfoma, conocida como etapa 5, generalmente ocurre cuando el cáncer se disemina a la médula ósea de la mascota. Si su perro presenta alguno de los siguientes signos o síntomas, llévelo al veterinario inmediatamente.
Nódulos
Al igual que en los humanos, los nódulos en un perro no son normales. Si descubre un bulto duro y redondeado en el abdomen, la espalda, el cuello o la axila del animal, que no estaba allí antes, puede haber un problema. Recuerde que algunos perros mayores desarrollan depósitos de grasa que son más suaves que los bultos problemáticos. Si no está seguro, consulte a su veterinario.
Pérdida de apetito o náuseas
Todos los perros disfrutan de la hora de comer y es un hecho conocido que están muy motivados por la perspectiva de comer. Si el perro comienza a comer notablemente menos o no come todo, es probable que no se sienta bien. Si el animal comienza a vomitar o ahogarse después de las comidas o con mayor frecuencia a lo largo del día, es muy probable que esté experimentando un problema de salud grave.
Perdida de peso
Un signo revelador de la salud canina es la rápida pérdida de peso. Si el apetito del perro no ha desaparecido por completo, pero sigue perdiendo peso rápidamente, suele ser una señal de que algo anda muy mal. La pérdida de peso visible es uno de los principales signos del linfoma canino.
Depresión
Cuando un perro se vuelve letárgico, deprimido y deja de jugar juegos que solían darle un gran placer, es probable que haya un problema de salud subyacente. Si sospecha que el animal está enfermo, comience a monitorear su actividad diaria y, si se observa un cambio importante, consulte al veterinario.
Fiebre
Los perros suelen ser cálidos, por lo que determinar si el animal tiene fiebre puede ser difícil. Si ha tenido uno o más de los otros síntomas de esa lista, es posible que sea necesario tomarle la temperatura. La fiebre recurrente o la fiebre que dura más de un día deben tomarse en serio. La fiebre del perro generalmente no es un síntoma "único" y generalmente significa que el perro está enfermo y necesita atención médica.