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Los estudiantes con trastorno negativista desafiante o TND pueden representar mucho trabajo para los maestros. Estos estudiantes son deliberadamente agresivos, vengativos, tercos y manipuladores y se niegan a obedecer a los adultos. El manejo de la ira y la terapia conductual son útiles para estos estudiantes, pero un maestro de escuela no puede ofrecer estos métodos. Entonces, necesita encontrar otras formas de lidiar con este niño.
Mantener la calma
La mayoría de los estudiantes quieren complacer a los profesores. Este no es el caso de aquellos con ODD. Los profesores que responden a las provocaciones de los estudiantes, se involucran en discusiones con ellos, intentan obligarlos a cooperar, amenazarlos o gritar pueden alentar comportamientos aún peores, ya que estas son las reacciones que los estudiantes buscan. En cambio, el maestro puede establecer reglas claras y específicas y ser objetivo sobre las consecuencias sufridas cuando se rompen esas reglas. Frases como "esto es lo que pasa cuando rompes las reglas", dichas de manera normal y objetiva, serán más efectivas que una respuesta muy emocional.
Establecer una relación de confianza
Los niños con TND creen que los adultos no están de su lado, ya que la mayoría de los tratamientos que reciben son severos y punitivos. Los maestros pueden establecer una relación de armonía y confianza con los estudiantes con ODD siendo imparciales, justos y confiables. Estos niños responden bien a los adultos que creen en la capacidad de controlarse a sí mismos y que están dispuestos a hablar sobre su comportamiento de manera honesta y objetiva. Los maestros deben tener reuniones privadas con los estudiantes, escuchar su versión de los hechos, preguntar qué pueden intentar cambiar para ayudar y decidir juntos las reglas y los planes de acción. Cuando estos niños están incluidos en el proceso de toma de decisiones, es más probable que respeten estas reglas.
Apoyo positivo
El apoyo positivo puede ser complicado con los estudiantes con ODD, ya que buscan críticas para poder responder deshaciendo cualquier cosa buena que hayan hecho antes. Los maestros pueden solucionar esta situación elogiando el trabajo en lugar del alumno, como "este trabajo es excelente" en lugar de "lo estás haciendo bien" o elogiando por escrito en lugar de decirlo en persona. Los maestros también pueden recompensar el buen comportamiento con privilegios u oportunidades especiales, como ayudar a preparar materiales para un experimento científico.
Vida académica
Los estudiantes con ODD tienen poca tolerancia al aburrimiento o al estrés, por lo que trabajan mejor cuando la carga académica está al ritmo y nivel adecuados para ellos. Los maestros pueden alentar a estos estudiantes a que completen trabajos que no les gustan "sobornándolos" con tareas divertidas; por ejemplo, cuando terminan una cierta cantidad de ejercicios de matemáticas, pueden dejar sus estudios un poco y leer un libro por un tiempo antes de reanudar los ejercicios. Los maestros también deben darles a estos estudiantes una segunda oportunidad cuando no les está yendo bien.