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El latón es una aleación compuesta de cobre y cinc. En su estado recién fundido, el latón asume un tono dorado que puede ser pulido para brillar. Sin el pulido o un revestimiento con barniz protector, el latón puede manchar a través de un proceso conocido como oxidación. Esta oxidación, que afecta inicialmente a la superficie del metal, sirve para disminuir el proceso de corrosión y dar al latón una pátina, que puede ser deseable o frustrante, dependiendo de su perspectiva.
historia
El latón es una aleación que fue encontrada por muchos estudiosos en artefactos del período prehistórico. Debido a su alto brillo, el latón se utilizó a menudo como espejo en varias civilizaciones antiguas. Muchas culturas utilizaron el latón para la fabricación de monedas y la decoración. Dependiendo de la proporción de cobre y zinc, el latón puede manchar o oxidar más lentamente que otros metales, haciéndolo ideal para usos contemporáneos, como en la producción de instrumentos musicales, tuberías y aplicaciones eléctricas.
función
La oxidación del latón ocurre cuando las moléculas de cobre entran en contacto con el oxígeno. La reacción química que ocurre resulta en una mancha opaca que varía de amarillo verdoso a rojo cobrizo, dependo de la proporción de cobre y cinc del latón. La capa oxidada, o pátina, provee un revestimiento protector alrededor de las capas interiores de latón. Para aplicaciones decorativas, la pátina es considerada deseable por muchos, pues da al latón la apariencia de un objeto antiguo.
tipos
Hay dos tipos de oxidación del latón: la natural y la artificial. El latón se oxida naturalmente cuando se expone a los agentes atmosféricos. En detalles de casas antiguas, hechas de latón, como manijas y aldravas, la coloración varía según el proceso de oxidación avanza. Ocasionalmente, los restauradores de inmuebles desean recrear la pátina de latón oxidado sin tener que esperar durante varias décadas. Para lograrlo, expone las piezas de latón a alguna de las varias soluciones oxidantes disponibles en el mercado.
beneficios
La oxidación es un medio natural de retardar el proceso de corrosión del latón. En aplicaciones que son más funcionales que decorativas, como en la relojería fina, es aconsejable permitir la oxidación en lugar de intentar el pulido. En estos casos, quitar la capa existente de oxidación sólo aumentará la rapidez del deterioro del metal. En aplicaciones decorativas, la oxidación natural, o patinaje, del latón es considerada por muchos una característica que da belleza al objeto.
Prevención / Solución
El latón, cuando muy pulido, gana un aspecto brillante, parecido al oro, que es admirado por muchos. Este brillo puede ser mantenido cubriendo el latón con una fina capa de poliuretano o barniz, que impide que el oxígeno del aire entre en contacto con las moléculas de cobre del latón. Un gran número de fabricantes ahora ofrecen latón cubierto con una capa ultrafina de paladio, níquel o algún otro metal estable, que previene la oxidación y garantiza el brillo del latón.
