Contenido
Vender chatarra puede ser una forma para que muchas personas ganen dinero extra, especialmente durante los proyectos de renovación de viviendas o al separar la basura. Sin embargo, es importante saber qué metales se están recolectando, ya que deben separarse, limpiarse y transportarse cuidadosamente a la ubicación adecuada. Por lo tanto, es importante conocer la diferencia entre la chatarra y otros metales, además de colocar cada parte en las categorías adecuadas antes de reciclarla.
Paso 1
Conozca sus metales. Por ejemplo, las latas de refresco y los muebles de jardín están hechos de aluminio, que no se oxida y tiende a ser bastante liso. Las tuberías de agua tienden a estar hechas de cobre, que es el mismo material que se usa para forrar monedas de cinco centavos. Cuando se oxida, el cobre se vuelve verde. El hierro tiende a ser negro y, cuando se oxida, forma un óxido rojo, que también se verá en el acero. Sin embargo, el acero no es originalmente negro.
Paso 2
Usa un imán. El hierro es un material magnético, y si no está seguro de si cierto metal, que parece hierro, está hecho de ese material, verifique que sea magnético. El hierro también es más pesado que el acero, en caso de que no esté seguro de si la muestra es hierro o acero. El comprador de chatarra podrá diferenciar ambos metales, pero use su sentido común.
Paso 3
Coloque los metales en pilas separadas y lávelas. Una vez que estén todos secos, colóquelos en latas, bolsas o cajas para enviarlos. Luego, lleve la chatarra al comprador.
