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Las plantas producen su propio alimento, conocido como glucosa, a través de un proceso llamado fotosíntesis. Para realizar la fotosíntesis, la planta necesitará cuatro elementos: cloroplastos, luz, agua y dióxido de carbono. Todo lo demás lo producirá por sí mismo. Lo único que los jardineros deben proporcionar a la planta es luz y agua. El cloroplasto y el dióxido de carbono son independientes de su suministro.
Cloroplastos
El cloroplasto es la ubicación de la planta donde tiene lugar la fotosíntesis. Hay dos partes del cloroplasto que son las más importantes para su realización. Tylacoides es el lugar donde se almacena la clorofila necesaria para producir la fuente de energía ATP (trifosfato de adenosina) y el agente reductor NADPH (dinucleótido de nicotinamida y adenina). El estroma es donde termina la fotosíntesis y se produce la glucosa.
Ligero
La luz es el ingrediente más importante en la fotosíntesis y le da nombre al proceso. Cuanta más luz recibe la planta, más glucosa puede producir para proporcionar energía. Algunas plantas necesitan más luz que otras para completar el proceso. Entra en el tilacoide del cloroplasto y reacciona con la clorofila para producir electrones. Estos electrones producirán ATP. La parte donde la luz solar participa en la fotosíntesis se conoce como fase de luz.
Agua
Durante la fase clara, las moléculas de agua se rompen. Las plantas obtienen agua de la lluvia o del riego. Cuando las moléculas de agua se descomponen, se producen electrones, NADPH y oxígeno. Estos electrones reemplazan a los perdidos por la clorofila y se libera oxígeno. El NADPH y el ATP creados por la luz continúan el proceso para producir glucosa.
Dióxido de carbono
Durante la fase oscura de la fotosíntesis, también conocida como ciclo de Calvin, las plantas utilizan CO2 (dióxido de carbono) de la atmósfera. Tan pronto como ingresa al proceso, se convierte en GP (glicerol-3-fosfato). El ATP y el NADHP se utilizan para transformar el GP en GALP (gliceraldehído-3-fosfato). Algunos de ellos se convierten en glucosa y el resto continúa el ciclo de Calvin convirtiendo más CO2 en GP.