Contenido
- Granos y semillas
- Frutas durante un ataque
- Verduras durante un ataque
- Frutas como prevención
- Verduras como prevención
- Suplementos alimenticios
La diverticulitis ocurre cuando se inflaman pequeñas bolsas a lo largo del revestimiento del sistema digestivo, conocidas como divertículos. Los síntomas incluyen dolor abdominal, cambios en las deposiciones, fiebre y náuseas. Por lo general, se recomiendan medicamentos y reposo como parte del tratamiento. Aunque se recomienda una dieta líquida y baja en fibra durante el ataque, es necesario realizar cambios en la dieta para prevenirlo. Estos cambios incluyen más fibra de frutas y verduras. Consulte a un médico para determinar la dieta más adecuada.
Granos y semillas
Según la Clínica Mayo, los médicos solían creer que las nueces, las semillas y el maíz estaban atrapados en divertículos, causando inflamación. Ahora bien, hay estudios que contradicen esta idea. Estos alimentos no provocan infección ni la previenen. Pero pueden, sin embargo, ser irritantes para la afección.
Frutas durante un ataque
Durante un ataque de diverticulitis, los médicos recomiendan una dieta líquida baja en fibra hasta que desaparezca la inflamación. Las frutas bajas en fibra incluyen frutas enlatadas y jugos sin pulpa. Se recomiendan las frutas congeladas siempre que no contengan semillas ni pulpa, ya que pueden irritar los divertículos. Los postres hechos con frutas también deben estar libres de piel, pulpa o semillas.
Verduras durante un ataque
Durante un episodio de diverticulitis, se recomiendan las sopas como parte de la dieta líquida. Prepara un caldo de verduras para beber. Retire bien la piel y las semillas y luego cocine muy bien las verduras para reducir el contenido de fibra.
Frutas como prevención
La Clínica Mayo recomienda un consumo de 20 a 35 gramos de fibra al día para prevenir ataques de diverticulitis. Las manzanas, los dátiles, los tomates, las frambuesas, las naranjas, los plátanos y las peras son buenas fuentes de fibra. Una cantidad necesaria para obtener una porción de fibra puede incluir 180 ml de jugo, media fruta de tamaño mediano, 1/4 de taza de frutos secos o 1/2 taza de fruta fresca. Estas son las recomendaciones dadas por el Departamento de Agricultura de EE. UU.
Verduras como prevención
Los médicos recomiendan aumentar el consumo de verduras. Las verduras ricas en fibra incluyen espinacas, guisantes, alcachofas y todo tipo de frijoles. Una porción adecuada es media taza de frijoles o guisantes, media taza de verduras crudas o cocidas, una taza de verduras o 170 ml de jugo puro de verduras. Estas medidas preventivas son recomendadas por el Departamento de Agricultura de EE. UU.
Suplementos alimenticios
Personas a las que les cuesta seguir estrictamente la dieta de frutas y verduras, suplementos con cereales, como los cereales, y suplementos ricos en fibras, como Metamucil.