Contenido
- Síntomas y diagnósticos
- Procedimiento Kidner
- Protocolo de rehabilitación general
- Protocolo de fisioterapia
El procedimiento de Kidner es una cirugía que se realiza en el escafoides accesorio. El hueso navicular se encuentra en el arco del pie y está conectado al tendón tibial posterior. Esta estructura ayuda a sostener el arco. Un navicular accesorio es un hueso extra, ubicado en el empeine, que causa pie plano. En esta condición, el hueso navicular y el navicular accesorio se unen y pueden causar dolor. La corrección quirúrgica se realiza solo después de que los tratamientos comunes han fallado y el cirujano prescribe el protocolo de rehabilitación.
Síntomas y diagnósticos
El síntoma más asociado al accesorio navicular es el dolor en el empeine, que puede acentuarse al caminar. Si ese hueso se vuelve doloroso, generalmente ocurrirá en la adolescencia. Si no causa dolor, los tratamientos, sean quirúrgicos o no, no son necesarios. Los médicos identifican el problema cuando el paciente dice que tiene dolor y, a menudo, se puede confirmar con solo una radiografía.
Procedimiento Kidner
El procedimiento de Kidner es una cirugía simple. Para corregir el escafoides accesorio, el cirujano realiza una pequeña incisión por encima del hueso extra. Luego se separa del tendón tibial posterior y se extrae. El tendón se une al hueso navicular y se cierra la incisión.
Protocolo de rehabilitación general
El paciente está enyesado, incluso por debajo de la rodilla, y permanecerá con el yeso durante aproximadamente tres semanas; después de eso, el equipo médico se pondrá una bota ortopédica. El paciente usa muletas durante muchos días y un fisioterapeuta podrá enseñarle el uso correcto de ellas. Si sus suturas no son absorbibles, se retirarán entre 10 y 14 días después de la cirugía. Aproximadamente cuatro semanas después del procedimiento quirúrgico, al paciente se le quitarán las botas ortopédicas y comenzará la fisioterapia, que consiste en una serie de ejercicios de estiramiento para disminuir la tensión en el tendón. Las actividades normales deben reanudarse en aproximadamente tres meses.
Protocolo de fisioterapia
El cirujano determinará si se necesita fisioterapia después de la cirugía. La fisioterapia comenzará con hielo, masajes e hidroterapia para controlar el dolor y la hinchazón y fortalecer el tendón. Los fisioterapeutas generalmente recomiendan la terapia acuática, ya que el agua proporciona un ambiente seguro para que el paciente haga ejercicio sin tensar indebidamente el tendón. Cuanto más se fortalece, el paciente participa en otros ejercicios, que consisten en estirar el tendón para proporcionar más movilidad. La fisioterapia ayuda a mejorar el movimiento y asegura que el paciente camine normalmente. Una vez que el movimiento normal y la fuerza regresan, la fisioterapia finaliza y el paciente continúa haciendo ejercicio en casa para mantener el tendón flexible.