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El oxalato de calcio, un tipo de sal mineral, es el componente principal de los cálculos renales en aproximadamente el 80% de los casos. Al ser un subproducto común de la digestión y eliminación humana, generalmente es inofensivo. Sin embargo, en personas que son susceptibles a la formación de cálculos renales, el oxalato de calcio puede provocar un dolor extremadamente intenso. Afortunadamente, con algunos ajustes en su dieta y estilo de vida, puede limitar o prevenir la formación de estos cálculos renales.
Cómo se forman los cálculos de oxalato de calcio en los riñones
El oxalato de calcio se forma en el intestino grueso cuando las fuentes de calcio de la dieta se unen a la sal de ácido oxálico (oxalato). El oxalato se produce principalmente en el hígado, pero también se encuentra en varios alimentos. Cuando el oxalato se une a las moléculas de calcio, las hace más o menos insolubles. Cuando el oxalato de calcio ingresa a los riñones, puede formar cristales en la orina. Sin embargo, dado que la mayoría de las personas no tienen tendencia a formar cálculos renales, esto no es un problema. E incluso en personas predispuestas a la formación de cálculos renales, la mayoría de los cristales producidos son demasiado pequeños para causar problemas. Sin embargo, cuando los cálculos se vuelven lo suficientemente grandes, pueden alojarse en los riñones o en el tracto urinario, causando dolor e incomodidad extremos.
Prevención básica
Para identificar si las piedras en sus riñones fueron causadas por oxalato de calcio, deberá consultar a su médico. Las piedras pueden provenir de diferentes fuentes, por lo que debe conocer la causa para abordar posibles problemas. Un método de prevención que se aplica a todo tipo de cálculos es mantenerse bien hidratado. El bajo consumo de agua puede conducir a la eliminación de orina altamente concentrada, y esto conduce a la construcción de un ambiente ideal para predisponer la formación de cristales sólidos por el oxalato de calcio. Si ha tenido cálculos renales y está tratando de evitar que regresen, los médicos generalmente recomiendan una ingesta diaria de líquidos.Si tiene riesgo de formación de cálculos, beba mucha agua porque es una excelente línea de defensa.
Pasos adicionales
Si le diagnostican este tipo de cálculos, reduzca o elimine los alimentos con cantidades importantes de oxalato, como espinacas, remolacha, ruibarbo, acelgas, germen de trigo, chocolate, maní, quimbombó, batatas, hígado, granos, uvas, pimientos. té verde, apio, fresa y negro. Muchos alimentos contienen oxalato en concentraciones más bajas, pero generalmente no son muy riesgosos. Consulte a un nutricionista para obtener más información sobre los alimentos que contienen esta sustancia.
Si bien puede parecer un poco contradictorio, puede beneficiarse de aumentar moderadamente su ingesta de calcio. Los oxalatos libres en la orina aumentan la tendencia a la formación de cálculos. El calcio ingerido correctamente se unirá a los oxalatos libres en la orina lo suficiente como para disminuir las posibilidades generales de formación de cálculos. Sin embargo, asegúrese de obtener su calcio de fuentes alimenticias (se prefieren los productos lácteos) porque tomar suplementos puede aumentar sus posibilidades de formación de cálculos renales. Consulte a su médico para determinar un nivel aceptable de consumo.
